A bordo del barco Beautriton Sneek ayer partieron desde el Puerto Internacional de Esmeraldas, con rumbo a Francia, las primeras 2.100 toneladas, de 5.600 en total, de desechos tóxicos que se generaron en la Refinería de Esmeraldas y que serán eliminados en fábricas especiales dedicadas exclusivamente al tratamiento de pasivos ambientales.
A la ceremonia de zarpe del barco, contratado especialmente para el transporte de los desechos tóxicos, asistieron las principales autoridades de la provincia y los directivos de la compañía Veolia Envronmental Service, responsable de la carga.
↧